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¿Sirve la relajación como tratamiento de adicciones?

By 10 marzo, 2021Adicción
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Existen infinidad de técnicas y métodos distintos a la hora de abordar una adicción. Así, se ha documentado una amplia gama de instrumentos o formas de terapia diferentes para tratar a las personas con problemas adictivos, algunas más eficaces que otras.

Por poner ejemplos, un gran número de profesionales utilizan las denominadas “terapias de grupo”. En este caso concreto sí que se ha podido verificar su gran eficacia, pues ayudan a la persona a sentirse ampliamente comprendida por quienes le rodean. Además de ser un espacio donde poder expresarse, también muchas veces encuentran en ellas la motivación necesaria para el tan ansiado cambio.

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Otra herramienta bien podría ser la escritura terapéutica. Cada vez son más los profesionales que la utilizan, ya que ayuda al paciente a ganar más perspectiva acerca de su problema, así como para sacar hacia fuera todo aquello que no siempre consigue hacer verbalmente.

Por último, otro de los instrumentos que más utilidad ha mostrado es la psicoterapia. Una vez más, si es bien utilizada puede llevarnos a obtener una serie de resultados muy positivos en lo referente a la superación de la adicción. En este caso, la confianza en el terapeuta y el establecimiento de una alianza fuerte entre ambos, constituyen la piedra angular del futuro éxito. Cabe mencionar que dentro de la psicoterapia existen muchas corrientes distintas, aunque el cometido de este artículo no está en detenernos a analizar todas ellas. Simplemente diremos que existen, y que cada una cuenta con sus propios métodos y procedimientos.

En concreto, hoy nos gustaría detenernos en una específica, ampliamente utilizada para el tratamiento de la adicción: la relajación.

¿Qué son las técnicas de relajación?

Si damos por sentado que la ansiedad es uno de los principales disparadores del consumo de drogas (por poner un ejemplo), parece lógico pensar que el aprendizaje de un adecuado manejo de esa ansiedad conllevará a un mayor control en el consumo. Además, parece que esto no solo es así en el caso de una adicción a las drogas, sino que también ocurre en aquellas sin sustancia o conductuales.

Para entender mejor de lo que estamos hablando, comenzaremos por aclarar que las técnicas de relajación constituyen un amplio grupo de procedimientos y métodos que buscan aprender a relajarse y reducir sus niveles de ansiedad y angustia.

Es importante aclarar que hay muchos tipos distintos de relajación, así que en este artículo únicamente nos detendremos en mencionar un par de ellos, quizá los más utilizados.

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¿Cuáles son las técnicas de relajación más comunes?

Comenzaremos por explorar aquellas que mejores resultados han brindado. Se trata de las denominadas técnicas de respiración. En ellas, el profesional encargado de aplicarla anima al paciente a que se tumbe cómodamente boca arriba en una esterilla o superficie confortable. Una vez hecho esto, le ayuda a ser consciente del modo natural en el que respira, para posteriormente ir introduciendo alguna información importante al respecto. De esta forma, la persona que la recibe comienza poco a poco a aprender a respirar de un modo más sosegado y pausado, por lo general en base a unas respiraciones más profundas y calmadas.

Úsala cuando quieras

Estas cuentan con la gran ventaja de que, una vez son aprendidas tras una serie de sesiones, la persona es capaz de utilizarlas en cualquier momento de su vida que sea necesario. Es decir, alguien con problemas de adicción podría acabar empleándolas en una situación de crisis, ya sea por la propia abstinencia o por un momento estresante de su vida que le lleve a consumir.

La otra de las técnicas de relajación es la meditación. En realidad se trata de un concepto muy amplio, pero en resumidas cuentas lo que busca es acallar la mente y calmarla. Esto no se consigue basándose en una resistencia a nuestros pensamientos, sino todo lo contrario. Lo que en realidad buscamos es aceptarlos tal y como se nos presenten en la cabeza sin luchar contra ellos. Se trataría de una especie de potenciación de la conciencia, una observación del mundo interior sin necesidad de intervenir.

En este caso, el profesional encargado de instruir en meditación puede animar al paciente a que se siente cómodamente y en silencio y esté muy atento a las sensaciones que experimenta. Aquí entrarían tanto los pensamientos como las corporales. La consigna es la “no resistencia”, es decir, la aceptación incondicional de todo aquello que surge sin ser algo que eliminar.

¿Hasta qué punto ayudan estas técnicas?

Varios estudios han demostrado que la relajación tiene efectos muy positivos en nuestro organismo. Solo por mencionar algunos, quien las practica regularmente tiende a mejorar su digestión, a disminuir sus niveles de ansiedad o ira, a hacer descender el azúcar en sangre o incluso su concentración y su estado de ánimo.

Un entrenamiento en técnicas de relajación ayuda a prevenir las recaídas y a saber tratar mejor con aquellas situaciones que actúan como disparadores del consumo. Se podría obtener de ella una serie de sensaciones agradables, las cuales podrían sustituir a aquellas producidas por las drogas. Dicho de otra forma, lo ideal sería que el adicto “se enganchara” a su propia respiración, bien ejecutada.

En resumidas cuentas, en Fromm Bienestar consideramos que todo profesional ha de estar familiarizado con las principales técnicas de relajación. Si se usan bien, además de utilizadas junto a otros métodos de trabajo, sus resultados podrían ser muy beneficiosos.

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